Overblog
Edit post Seguir este blog Administration + Create my blog
El Custodio

Aumenta la Desigualdad Social en Los Estados Unidos

24 Diciembre 2013 , Escrito por elcustodio Etiquetado en #Opinión

Abel Pérez Zamorano./ El Custodio.

 

Estados Unidos ha sido percibidopor mucho tiempocomo una especie de Tierra Prometida, adonde millones de personas de la más diversa procedencia podían emigrar para ponerse a salvo de las calamidades sociales de sus propios países; tal fue el caso, por ejemplo, de los irlandeses, que emigraron masivamente a mediados del siglo XIX. La colonización del lejano oeste americano tuvo incluso connotaciones épicas, y pasaron a formar parte del folklore los colonos, quepenosamente se abrían paso hacia el lejano oeste, donde,con relativa facilidad, podíanhacerse de una porción de tierra para establecer en ella una pequeña granja yconvertirse en exitosos criadores de ganado, rompiendo así su condición de proletarios. Un hecho documentado es que muchos obreros asalariados llegados de Inglaterra abandonaban sus míseros empleos en el Noreste americano para emigrar al oeste y convertirse en propietarios libres. Más recientemente, desde mediados del siglo pasado, un total de doce millones de mexicanos han emigrado también en busca del “sueño americano”, a un país de salarios altos, donde, dice la fama,“se puede mejorar si se trabaja”; la tierra de oportunidades, el welfare state. Pero después de siglo y medio de progreso, que convirtió a Estados Unidos en la esperanza capitalista de los pueblos, parece ser que esa relativa mejoría social que venía produciendo está agotándose. Así lo percibenal menos los propios ciudadanos norteamericanos.

El 11 de diciembre,Bloomberg publicó una encuesta (Bloomberg National Poll),cuyo tema central fuela desigualdad social en Estados Unidos. Los resultados que arroja no dejan lugar a dudas sobre la percepción de desencanto que priva entre la mayoría de los habitantes de ese país, y que no es gratuita, pues tiene su fundamento en la extrema polarización de la economía. El 68 por ciento de los encuestados opinaron que la brecha entre pobres y ricos se ha hecho mayor; el 18 por ciento piensa que se mantiene igual y sólo el 10 por ciento considera que ha disminuido.En coincidencia con esa percepción, “73 por ciento de quienes ganan menos de 50 mil dólares al año creen que el sistema económico es injusto”.Bloomberg agrega datos que confirman ese sentir y que muestran una escandalosa concentración del ingreso; algunos de ellos son los siguientes: “10 por ciento de los estadounidenses más ricos ganaron más de la mitad de los ingresos del país en 2012”; en Estados Unidos las 400 fortunas más grandes tienen más dinero que los 150 millones de personas más pobres, y “1% de la población suma más del 40% del patrimonio privado”.Estas cifras muestran, efectivamente, una exagerada concentración del ingreso.

Mas la encuesta no sólo registra el sentir de la población ante el problema, sino ante la actitud de los gobernantes. Sobre la pregunta de quién puede corregir la situación, el 52 por ciento de los encuestados respondió que los funcionarios del gobierno deben hacerlo, mientras que el 35 por ciento opinó que el mercado por sí mismo corregirá.En el portal de Bloomberg donde se comenta la encuesta, el 56 por ciento critica la teoría del “trikle down” (filtración), de acuerdo con la cual basta con el mero crecimiento económico para que la riqueza se distribuya en automático. No deja de llamar la atención que la mayoría de los participantes considere que el mercado no es la solución, y esto revela, de una u otra forma, un progreso en la conciencia social, que se libera de la ilusión de que el mercado es el mecanismo idóneo para la distribución del ingreso. De todas formas, sigue quedando la esperanza de que los funcionarios deben resolver el problema, una ilusión, pues se ignora el hecho de que ellos representan a los grandes empresarios, a los beneficiarios mismos del actual orden de cosas, y por tanto, dejar en sus manos la posible solución sería algo así como esperar que Poncio ponga en orden a Pilatos. Y en este sentido, Bloomberg cita también declaraciones de una reconocida economista norteamericana, quien subraya que: “Los Estados Unidos hacen hoy menos para reducir la desigualdad a través de impuestos y políticas de transferencias en comparación con las naciones más avanzadas…” (Janet Gornik, profesora de ciencias políticas y sociología en el Centro de Graduados de la Universidad de la Ciudad de Nueva York). Y ella misma destaca que, en cuanto a aplicación de políticas distributivas, países como Dinamarca y Suecia están muy por delante de los Estados Unidos.

En resumen, la encuesta ofrece una excelente radiografía, en primer lugarsobre la forma en que la sociedad norteamericana percibe la inequidad distributiva en su país, y que ya no es la suya la economía de oportunidades “para todos”, sino propiedad de una elite de privilegiados, que margina a la gran mayoría. En segundo lugar, y muy importante, los ciudadanos extraen sus propias conclusiones: el Estado debe hacer más para revertir esta tendencia. No es de sorprender que el hombre común, con menos telarañas teóricas y enredos abstractos en la cabeza que muchos economistas,intuya al menos que el mercado no es la solución del problema. Y ese juicio popular no está errado, pues el mercado, lejos de ser la solución a la exagerada acumulación del ingreso, es exactamente lo contrario:el mecanismo mediante el cual se realiza esa concentración. Pero aunque la población, por experiencia y propia intuición, pierde la fe en el mercado, es claro que aún conserva la ilusión de que el gobierno habrá de redimirla; el problema es que deja de lado que el Estado por sí solo tampoco lo hará, pues en él se imponen los intereses de los mismos dueños del mercado. De todas formas, el Estado puede intervenir y atenuar los excesos del capital, siempre y cuando la sociedad civil, organizada y consciente así se lo exija, de manera que a la presión ejercida por los empresarios se oponga la exigencia de justicia distributiva por parte de la gran mayoría social empobrecida.

México, D.F, a 23 de diciembre de 2013.

Compartir este post
Repost0
Para estar informado de los últimos artículos, suscríbase:
Comentar este post