CODIGO DE GUERRA

 
Opinión y Comentario

Por: J. Gpe Guerra Rivas

En los últimos días la violencia se ha desencadenado en varios estados del País, pero principalmente en los estados del Norte, Nayarit por supuesto no es la excepción en  estos días los reporte periodísticos en sus espacios de nota roja registran un repunte en las estadísticas de criminalidad resaltando que la mayoría de los caídos en esta guerra sin cuartel por el control de la Plaza, son jóvenes, casi niños, como es el caso de los muchachos encontrados en la Colonia “El Tecolote” Rodolfo Ríos Hernández de solo 17 años de edad y de la niña Alejandra Jazmín Sandoval Cortez, que al momento de su trágica muerte contaba con 14 años, el informe de la Agencia Estatal Investigadora –AEI- destaca que estos jóvenes fueron encontrados en el interior de un vehiculo marca VW tipo Jetta modelo 2011 en color Arena con placas del estado, ambos cuerpos presentaban impactos de proyectil de arma de fuego principalmente en la cabeza, en el interior del auto se encontraron según los datos de la fuente, un envoltorio de plástico que contenía al parecer Cocaína y billetes de varias denominaciones.

Esto hace pensar que estos jóvenes –niños- realizaban actividades delictivas relacionadas con el narco.

Es de todos conocido que la delincuencia organizada en todas sus vertientes esta reclutando jóvenes para sus fines delincuenciales, muchachos que luego son utilizados como alcones o narcomenudistas que llevados por la falta de un empleo y tal vez por no encontrarse en alguna aula escolar, se dejan seducir por la propuesta de dinero fácil.

Lo que quizás no les informan es que también es empleo altamente riesgoso y que el desenlace puede ser con los resultados arriba descritos, cuando mejor les va.

 La Guerra desatada por Felipe Calderón al principio de su administración contra la delincuencia organizada y el narcotráfico, continúa cobrando victimas inocentes, las evidencias de que su estrategia jamás ha dado resultado son claras. Por cada Capo que es arrestado, el grupo bajo su mando cobra varias victimas inocentes sin importar edad ni estrato social, pero como siempre los más afectados son los más desprotegidos. Los de Abajo, el que a diario tiene que salir a buscar el sustento de su familia, sin ninguna protección más que con la bendición de dios, un dios que parece estar ausente y un Papa que viene del Vaticano a pasear las reliquias de su antecesor, como esperando que eso sirva para detener este baño de sangre que parece no tener fin.   

Por su parte, el Presidente de la República Felipe Calderón, necio en su convicción de que le va ganando la guerra al narco continúa su ataque frontal a las bandas delictivas y no le importa pasar a la historia como el Presidente de los Cincuenta mil muertos, más los que se agreguen. Mientras Nayarit al igual que Monterrey y otros estados seguirán pagando la cuota de “daños Colaterales”, como Calderón les llama a los muertos que nada tienen que ver en esta guerra.

En Monterrey , los regios hartos de vivir con miedo han salido a las calles para pedir la renuncia de Felipe Calderón, pero si en el resto del País los méxicanos no reaccionan al movimiento de aquel estado, lo más seguro es que las cosas seguirán como estan y quizás empeoren como ya se deja sentir aquí en Nayarit donde los crímenes se han recrudecido.